LA DIVERSIDAD VEGETAL GADITANA REPRESENTADA EN EL JARDÍN.
La riqueza vegetal de Cádiz se debe a una conjunción de factores: El fuerte gradiente altitudinal: En muy pocos kilómetros el terreno asciende desde el nivel del mar a los 1654 m. de El Torreón, el pico más alto de la provincia en el Parque Natural Sierra de Grazalema. Los vientos dominantes, poniente (húmedo) y levante (seco), hacen que las condiciones cambien drásticamente de una vertiente a otra de las sierras. Y finalmente la variedad de suelos existentes en la provincia es muy amplia estando presentes, entre otros, las areniscas de la unidad del Aljibe, suelos de carácter ácido, y las calizas que ocupan toda la parte Norte y Oeste. Gracias a todos estos factores, en la provincia de Cádiz habitan unas 2.100 plantas superiores diferentes en una superficie de 745.000 Has. El pinsapar, al norte de la provincia, y los canutos de Algeciras, al Sur, guardan algunas de las más importantes joyas de la flora ibérica y europea que permanecen aquí gracias a unas especiales condiciones de humedad totalmente atípicas para la región mediterránea. Los alcornocales constituyen una de las masas arbóreas más densas y grandes de toda la península. Pinsapos, rododendros y helechos de hojas que pueden llegar a medir tres metros de longitud, son algunos ejemplos de las singularidades botánicas que podemos encontrar. Especial mención merece el espacio dedicado en el jardín a los cultivos tradicionales de la provincia, donde se ha hecho un esfuerzo importante en la recopilación y mantenimiento de las variedades más características.