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Preparar el terreno para el cultivoEl huerto, aunque sea pequeño, requiere una serie de cuidados, incluso cuando no hay nada plantado. El invierno será la mejor época para prestárselos, ya que es el momento de menos productividad.
Estas labores consisten principalmente en preparar el terreno, hacer la siembra o plantación... Algo a tener en cuenta es la rotación de cultivos. No es bueno sembrar todos los años lo mismo y en el mismo lugar. Cada cultivo necesita unos nutrientes que coge del suelo. Si siempre plantamos lo mismo, las necesidades serán también las mismas y la tierra se agotará sin poder aportar ningún beneficio.
La rotación también nos permite eliminar algunos insectos perjudiciales. La mayoría de ellos tienen un ciclo vital de un año. Si antes de que trascurra este tiempo cambiamos el cultivo, éstos morirán y evitaremos el daño para nuestros productos.
En cultivos pequeños no suelen darse
plagas, por lo que no será necesario emplear ningún producto químico que perjudique la calidad de nuestros alimentos. Si vemos que en nuestra región hay una determinada plaga en una cosecha, lo mejor será que ese año nos decantemos por otro cultivo, así evitaremos el problema a la vez que daremos un respiro a la tierra.
Cavando la tierra en invierno y haciendo rotaciones lograremos la protección suficiente, que completaremos con la eliminación manual de larvas o insectos que aparezcan ocasionalmente sobre nuestras hortalizas.
Árboles frutales
Si dispones de espacio suficiente, plantar frutales en tu jardín será una buena elección. Además de recompensarnos con deliciosas frutas, proporcionarán sombra que agradeceremos en los meses de más calor.
No todos los climas son aptos para todas las especies.
Los cerezos, por ejemplo, no se desarrollarán bien en climas tropicales, ya que necesitan retener frío para un adecuado crecimiento. El suelo debe ser fértil, con buen drenaje, rico en materia orgánica y sin exceso de caliza. Deberemos tener presente si nuestras especies necesitan polinizadores. El melocotonero, por ejemplo, no los necesita, y puede plantarse en solitario. Los manzanos, perales y ciruelos deben emplazarse junto a uno o más cultivos que florezcan al mismo tiempo. De esta forma los insectos polinizan las flores para que haya frutos.
El invierno es la mejor época para plantarlos, retrasándolo hacia finales de la estación si las heladas son muy duras. Debemos procurar que el lugar donde los pongamos sea amplio y soleado.
Llevar una vida saludable será más fácil si te alimentas con los productos que tú mismo cultivas. Si te gusta la naturaleza, dispones de espacio y de tiempo para dedicarle, crear un huerto en tu jardín será una buena opción para darle a tu organismo alimentos ricos y sanos
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