El curso del Sol
La historia de Apolo, ilustración del mito solar, dicta los temas de las estatuas y de las fuentes del eje central. El gran estanque del extremo occidental está decorado con el carro de Apolo: el dios solar surge de las aguas en un carro tirado por cuatro caballos. Cerca del palacio, Latona, madre de Apolo, domina la fuente central. El ciclo termina en la gruta de Tetis, desaparecida al construirse el ala norte.
Rigor...
El trazado general es geométrico: el jardín está ordenado a partir de un eje central con ejes secundarios, avenidas en forma de estrella, estanques circulares y semicirculares. Un conjunto simétrico organizado en varios niveles.
Los árboles están tallados rigurosamente creando una auténtica arquitectura vegetal.
En torno al palacio se extienden los parterres que, concebidos para ser vistos desde el primer piso, contribuyen al enaltecimiento de la arquitectura. El del Mediodía es un encaje («broderie») de boj coronado de flores, el del Norte está formado de boj y de césped, y, en el centro, los dos estanques de agua del parterre están delimitados por estatuas recostadas que simbolizan los principales ríos de Francia, obras maestras de la escultura de la época.
y fantasía
Pero a la vuelta de cualquier avenida surgen nuevos puntos de vista, nuevas fuentes, nuevas estatuas, emparrados en forma de bóveda, árboles tallados como si fueran madrigueras...
La fantasía se desarrolla en los 9 bosquecillos existentes de los 14 que hubo en su día. Estos bosquecillos crean «saloncitos» de vegetación en forma de ovillo situados en los pequeños bosques -de ahí su nombre- de las avenidas, desde las que nadie puede imaginarse la existencia de tales maravillas.